Semana de 14 días, esto no se acaba. Mucho, muchísimo trabajo, no duermo más de ocho horas desde...¿el día 9? Y estoy agotada. Pero este fin de semana ya no trabajo y voy a descansar y a disfrutar en muy buena compañía. Y en tres semanas vacaciones, que falta me hacen.
Como nota del día, una SOPLAPOLLAS (porque llamarla de otra forma es faltar a la verdad, y eso en este blog NUNCA) que ha venido a tocarme lo que viene siendo el fifi (cortesía de mi adorable hamija y vecina, muy fisna toda ella). Y lo siento mucho, pero esta semana es muy mala para eso. Os pongo en situación, yo sola en la tienda, ATENDIENDO a un cliente. Entra señora hija de la grandísima puta con niña de la mano. Señora fea, muy fea. Niña más fea todavía (qué cruel puede llegar a ser la madre naturaleza y los putos genes).
Señora hija de la grandísima puta: Hola, venimos a por espuelas de rodela.
Bit: Sí, ahí las tiene, justo delante de usted.
Señora hija de la grandísima puta: Pues no las veo.
Bit:
Señora hija de la grandísima puta: Ah, sí (cara de asco)
Bit con mucha mucha cara de asco.
La tía ha estado un buen rato más dando por culo, mi cara de hostilidad era más que evidente, la tensión se podía cortar hasta con un clip cuando de repente...¡¡ZAS!! Llega la hora de pagar. Mi ordenador va un poco lento y a veces se cuelga, y hoy ha pasado.
Señora hija de la grandísima puta: Voy a pagar con tarjeta.
Bit: (Ahora simpática porque ya se iba la pedorra de los cojones) Sí, sin problemas.
Ordenador colgado. Caca, pedo, culo, pis.
Señora hija de la grandísima puta: ¿Estás esperando a que te enseñe mi DNI?
Bit:
Señora hija de la grandísima puta: Ah...
Y en definitiva, eso ha sido todo. Mañana más y mejor (estáis que os lo creéis, actualizar mañana, jah. ¡Pringaos!)
Quizá después del finde me pase por aquí para daros un poquito de envidia...ains, felicidad.
Bit.