martes, 18 de octubre de 2011

Lo bueno si breve...

Pues ya estoy aquí de vuelta de mi fin de semana de relax total, arañando los días que me quedan de vacaciones y de no hacer NADA. Debo decir que estoy completamente enamorada de Galicia, de su gente, su gastronomía, su cerveza y por supuesto y un punto superior en el ránking, de su jodido PULPO.

Llegamos el jueves por la tarde, nos perdimos buscando el hotel, aquella maldita ciudad llena de cuestas y suelo empedrado, ideal para ir con las bolas chinas puestas, una pasada. Conseguimos llegar, dejar las cosas y salir echando leches, que la cerveza no se bebe sola. Y de cañeo, pedo bastante majo y a dormirla.

Me llama mi jefe el viernes por la mañana, gruño, me resisto, pero lo cojo. Llamada completamente innecesaria, he de decir, pero al fin conseguimos salir de la cama y a seguir comiendo y bebiendo. Y así todo el día, siesta y de fiesta otra vez.

Por fin sábado. No tengo palabras para describir ese día. Por la mañana, excursión a Illa de Arousa, un pueblecito PRECIOSO donde comimos DE PUTA MADRE con un paisaje INCREÍBLE. De verdad, aunque me hicieran subir al culo del mundo por unas escaleras que no se las deseo ni a un murciano, pero mereció la pena el paisaje. Y luego a hacer el París-Dakar. Muchas, muchás más risas con mi rubiña preciosa, mi morenaza guapísima, mi gallego de mis amores al que quiero con locura y mi valenciano. Vamos, que hacerte esa ruta con esos cuatro amigos que son completos amores no tiene precio. Que menudas risas nos echamos. Aunque he de reconocer que tengo muchísimas lagunas de esa noche, pero sólo sé que fui feliz y que me lo pasé genial, que me reí como nunca y disfruté como una enana. Ains, que me emociono.

Pero no os preocupéis, sigo siendo yo. "¿Nos haces una foto?" "Bueno, yo es que esto de hacer fotos no se me da muy bien" "Tampoco es tan difícil, sólo es apretar un botón". Y sí, nos hizo la foto, pero salió movida. Hijo de puta.

Y vuelta a Madrid, tristeza profunda. Que te escriba una amiga a las cuatro de la tarde que si hacemos birras. Salir de casa a las seis para ir a tomar unas cañas y amanecer a las 12 de la mañana en el piso de tu amiga con un cuenco de pota al lado de la cama, una resaca increíble, un moratón en la rodilla, el labio hinchado y el pómulo dolorido. Y lo mejor es cuando tu amiga te dice lo que hiciste esa noche, que no lo voy a contar aquí porque es vergonzoso hasta para mi. Sólo diré eso de "lo del labio y el pómulo será porque decidiste que era más seguro potar poniendo la cara en el asfalto". Sí, de ese tipo de persona soy.

Qué corto se me ha hecho, pero cuánto he disfrutado. Y me ha servido para aclararme yo, aclarar ciertas situaciones, recuperar a una persona a la que pensaba que había perdido y era muy importante para mi. Y qué coño, que estoy super feliz y contenta. Que me lo merezco y me tocaba.

Qué ganitas de volver y cuánto echo de menos a mis gallegos adorados. A ver si venís prontito a verme, josdeperra, que quiero repetir.

Y ahora a ver un poquito la tele, acostarme tarde y levantarme mañana a la hora de comer. Esto es vida, siestas de 3 horas, sin horarios, sin preocupaciones...

Bit.

No hay comentarios:

Publicar un comentario